lunes, 22 de mayo de 2017

Crítica: 'Piratas del Caribe: La maldición de la Perla Negra' (2003), de Gore Verbinski


Este viernes llegará a los cines españoles, por fin, la quinta entrega de una de las sagas más relevantes y exitosas, si no de toda la historia del cine, sí de lo que llevamos de siglo. 'Piratas del Caribe' vuelve, casi catorce años después del estreno de la primera parte. Aprovechamos la ocasión para echarnos a la mar y repasar las cuatro aventuras que hasta ahora ha protagonizado el capitán Jack Sparrow. Y comenzamos por esa sorpresa que fue 'La maldición de la Perla Negra'.

La historia, ambientada en el Mar Caribe en el siglo XVIII, muestra los intentos de Jack Sparrow por recuperar la Perla Negra, el barco que había capitaneado hasta el amotinamiento de sus tripulantes, mientras el herrero Will Turner hará todo lo posible para rescatar a Elizabeth Swan, secuestrada por la tripulación maldita de la Perla Negra, lo que llevará a ambos a unir fuerzas. En realidad todo es mucho más complicado, pues la película está estructurada en torno a continuos cambios de lealtades, amistades y bandos, impredecibles giros de guion y constantes sorpresas y trucos. 

Y aunque todo esto disminuye la profundidad, coherencia y lógica en la trama, permite una gran agilidad y un ritmo frenéticos que la convierten en una cinta entretenida como pocas. Gracias a la combinación de humor, acción, aventuras y romance en torno a una historia fantástica de piratas y fantasmas, con un reparto de lujo y un presupuesto de 140 millones de dólares, logró un éxito casi irrepetible que superó con creces cualquier expectativa. Con el respaldo de Disney, el público se enamoró de la vida pirata como nunca antes.

Pero más allá del blockbuster, hay que reconocer el buen hacer de los equipos de maquillaje, vestuario o efectos especiales, que alcanzan un realismo y una espectacularidad muy llamativos. Y también hay que destacar el trabajo de los actores, sobre todo, por supuesto, el de un Johnny Depp que confirmó su condición de estrella en uno de sus papeles más emblemáticos. El excéntrico y carismático capitán Jack Sparrow permitió a Depp un derroche interpretativo exagerado y trabajado, que se une además a la larga lista de personajes peculiares a los que ha dado vida el magnífico y polémico actor estadounidense.


Todo lo anterior generó un suculento botín a la cinta dirigida por Gore Verbinski, que consiguió cinco nominaciones a los Oscar, otra en los Globos de Oro y cinco más en los BAFTA, donde se llevó el Premio al mejor maquillaje. También el Sindicato de Actores entregó el galardón a Johnny Depp como Mejor actor. Y por encima de los premios y del reconocimiento de buena parte de la crítica, destaca el éxito del público y el hecho de haber pasado a formar parte de la cultura popular. El personaje de Jack Sparrow es de los más trascendentes del cine, la música de Hans Zimmer sigue poniendo fondo a momentos épicos y las aventuras marinas no se comprenden ya sin esta película.

Y es que 'La maldición de la Perla Negra' cambió la concepción del blockbuster y el cine de entretenimiento para siempre. Sin mayores pretensiones, porque no hacen falta, esta primera parte de 'Piratas del Caribe' surca los mares ofreciendo diversión y entretenimiento sin límites. Solo queda descorchar el ron y disfrutarla.

Lo mejor: Jack Sparrow, posiblemente el mejor pirata que hayáis conocido
Lo peor: la falta de coherencia o de profundidad en algunos aspectos de la historia
Nota: 8

(Publicado en Los Lunes Seriéfilos)

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