lunes, 20 de agosto de 2018

[Series] 'The Innocents': cuando una historia que engancha no es suficiente

'The Innocents': cuando una historia que engancha no es suficient

En ocasiones es necesario encontrarnos con series más o menos mediocres o que situaríamos por debajo de la media –en ningún caso hablo de malos trabajos– para poder darnos cuenta del verdadero nivel que las producciones de ficción televisiva han alcanzado en fechas recientes. La británica ‘The Innocents’ es una de esas series que hace algunos años hubiera estado en el top y que hoy parece decepcionar si se compara con otras grandísimas obras disponibles en Netflix, la plataforma en la que se estrena el próximo 24 de agosto.

June, una adolescente que vive con un padre muy restrictivo y un hermano que padece agorafobia, huye desde su pequeño pueblo hacia Londres con su novio del instituto. Allí, un intento de secuestro por parte de un hombre que dice conocer a su madre hace que June comience a experimentar cambios en su cuerpo que le llevan a adquirir de forma temporal la apariencia de las personas a las que toca. Una condición que, aparentemente, su madre también compartía. 

Sin resultar rompedora, se trata de una idea original que engancha, generando nuevas preguntas a medida que avanza. En este sentido, la narración resulta intencionadamente compleja, no permitiendo atar cabos hasta pasados un par de capítulos, e incorporando nuevas incógnitas, personajes y complicaciones en la trama.

The Innocent serie de Netflix

Escaso interés fuera de la historia 


Pero más allá de ese atractivo e interés por conocer el desenlace y las explicaciones que argumentan lo que conocemos, la serie no corre riesgos. El montaje y determinados aspectos de la narración resultan convencionales y previsibles, mientras que las actuaciones tampoco son extraordinarias. Se echa en falta algún elemento formal o técnico identificativo que ayude a resaltar y aprovechar el potencial de la historia. 

Volviendo al comienzo, en un contexto tan sobrecargado de series, y de buenas series, es necesario algún aspecto diferenciador, La nostalgia ochentera de ‘Stranger Things’, el carisma o la forma de hablar de los protagonistas de ‘Narcos’, la reivindicación por la libertad sexual en ‘Sense8’ o la estética oscura y misteriosa de ‘Dark’ –por citar solamente ejemplos de Netflix– son los que hacen que las tramas, ya de por sí atractivas de estas producciones, puedan destacar y ganar un valor añadido que las convierten en obras capaces de sobresalir. Eso es lo que le falta a ‘The Innocents’.

The Innocent serie de Netflix

No obstante, habiendo visto solo los cuatro capítulos disponibles antes del estreno, y siendo conscientes de la progresión en estos, el interés por la serie protagonizada, entre otros, por Guy Pearce, todavía tiene margen y capacidad para aumentar. Aunque todavía no sea conocido, la aparición de algún elemento diferenciador que complemente la trama, junto a un ligero pulido de las actuaciones y la fotografía, podría convertir en notable a una obra, por ahora, convencional.

Lo mejor: el interés por conocer qué ha pasado y qué pasará
Lo peor: su falta de riesgo y de atrevimiento para lograr una serie diferente


(Publicado en Los Lunes Seriéfilos)

lunes, 6 de agosto de 2018

[Series] 'La casa de las flores': una comedia negra mexicana sobre una familia muy poco convencional

Review de la serie mexicana 'La casa de las flores'

Decía Oscar Wilde que la mejor forma de evitar la tentación es caer en ella. Esa premisa parece seguir ‘La casa de las flores’, la última producción mexicana disponible en Netflix, pues para escapar de estereotipos lo que hacer es recurrir a todos ellos. Así, explota de una manera fresca muchos de los clichés de las telenovelas hispanoamericanas: amantes, suicidios, salidas del armario, hijos ilegítimos, problemas económicos de los ricos, encarcelamientos… 

Resulta igualmente curioso que las interpretaciones parecen, a su vez, estereotipos, con personajes simplistas e actuaciones burdas y poco sutiles. No obstante, el trabajo de los actores y actrices es más complejo y completo de lo que podría parecer en un principio, mientras que sus personajes siguen en su mayoría una notable evolución a lo largo de la temporada. Entre esos personajes destaca la inclusión de travestis, homosexuales, bisexuales o personas transgénero. La diversidad sexual que se muestra, aunque de una forma mucho menos ostentosa, podría incluso recordar a ‘Sense8’, algo muy meritorio en un trabajo procedente de un país tan conservador, algo sobre lo que se reflexiona en la propia serie. 

Lo mencionado hasta ahora da lugar a una obra moderna y profunda, que despierta debates intensos escondidos en una trama ligera y muy divertida. Pues, desde las interpretaciones, los encuadres y los propios contenidos de la historia consiguen un humor casi constante, que no suele llegar a la carcajada, pero que mantiene casi imborrable la sonrisa. Se trata de un humor negro y libre, capaz de tocar, sin demasiados tapujos, casi todo tipo de temas.

Review de la serie mexicana 'La casa de las flores'

Y eso a pesar de los dramas que se suceden porque, con toda su modernidad y novedad, no deja de tener un fuerte regusto a telenovela. Y esto no es en ningún caso negativo, pues es, junto a su ligereza, lo que engancha. Se convierte así en un placer (no tan) culpable, aunque tenga mucho más contenido del que se aprecie a simple vista o tras los primeros capítulos. 

Paco León es parte de una familia no tan perfecta 


‘La casa de las flores’ es el nombre de la floristería –o florería– que regenta una familia de la alta sociedad mexicana; una familia aparentemente perfecta a la que, poco a poco, le van surgiendo espinas y malas hierbas. Junto a destacadas figuras del cine y la televisión mexicanos, como Verónica Castro, uno de los personajes está interpretado por el español Paco León, que hace su aparición casi a la mitad de la temporada. Se trata de un punto de inflexión en el que tanto la trama que podríamos considerar principal como ese mensaje de igualdad y respeto que se intenta transmitir cobran fuerza.

Es con la llegada de su personaje con la que también un cierto caos que había reinado al principio de la narración se va asentando, y las distintas líneas de acción van adquiriendo sentido, aunque continúan los giros de guion y las sorpresas. Finalmente, no todas las tramas se cierran, y no todas lo hacen con un final feliz, lo que puede hacer sospechar una continuación a esta primera temporada que está a punto de florecer con todo su esplendor en Netflix. 

Lo mejor: su tratamiento ligero y humorístico de temas complejos y necesarios 
Lo peor: que el caos que se desata en la vida de los protagonistas al comienzo de la serie se traslada (quizás demasiado bien) al espectador, con cierta sensación de pérdida e incomprensión en algunos momentos 
Nota: 8

(Publicado en Los Lunes Seriéfilos)